Desde el Consejo Regulador de la Mojama de Barbate y Mojama de Isla Cristina velamos de forma activa por la calidad de la industria de salazones de la mojama andaluza que produce mediante procesos artesanales.
La formación de este consejo se produjo cuando la Comisión Europea aprobó en febrero de 2016 la inclusión de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Mojama de Barbate y Mojama de Isla Cristina en el Registro de Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) e IGP, según recoge el Diario de la Unión Europea (DOUE).
¿Qué es la IGP? Todo lo que necesitas saber
Pues bien, la IGP es la certificación de Indicación Geográfica Protegida otorgada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que acredita una elaboración artesanal, una calidad mínima y una recepción del producto en condiciones óptimas.
Sabemos que la calidad es lo más importante a la hora de la alimentación y por eso, día a día, mimamos todos los detalles para que cada paso del proceso de elaboración se realice con minuciosidad. Nuestros empleados ronquean siempre la parte noble del atún (los lomos) para obtener esa mojama extra y de primera.
El color exterior de una mojama de calidad lista para consumir debe ser marrón oscuro. Al corte, el color se torna granate con distintas tonalidades y, además, una buena mojama presenta las vetas propias de los lomos, más acentuadas en los lomos de primera por contener más grasa que los lomos extra. La textura debe ser compacta, lisa y poco fibrosa, de olor suave y sabor agradablemente intenso y salado a pescado azul.
¿Qué zonas cubre la elaboración de la IGP?
Normalmente hablamos siempre de Mojama de Barbate y Mojama de Isla Cristina, pero ahí englobamos por un lado Isla Cristina, Lepe, Cartaya y Ayamonte (Huelva) y, por otro lado, Barbate y Vejer de la Frontera.
Las exigencias que implica lucir el sello IGP
Todo nuestro proceso de elaboración, envasado y etiquetado es llevado a cabo dentro de nuestras fábricas para preservar las características físico-químicas y organolépticas del producto. Características relacionadas con el olor, sabor, color y, sobre todo, la cantidad de sal y humedad de la mojama.
En cuanto al etiquetado verás dos símbolos: el sello que hace mención a la Indicación Geográfica Protegida (IGP), con su respectiva mención, y el de la Unión Europea. Además, va escrita la denominación de origen: Mojama de Barbate o Mojama de Isla Cristina.
El Secretario general del Consejo Regulador de las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) Mojama de Barbate y Mojama de Isla Cristina, Manuel Becerra Guerrero-Strachan, declara que el velar por la autenticidad y la calidad del producto a la vez que el control de los procesos productivos es lo que al consumidor le aporta confianza.
Ahora ya sabes por qué la mojama con IGP de Mojama de Barbate y Mojama de Isla Cristina tienen tanta fama. Su calidad, elaboración cuidada y su sabor son capaces de conquistar a paladares por todo el mundo. Ya sea en los fogones más renombrados como en casa.